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Por Roberto Bahena


Dos agentes de la Policía Municipal de Hermosillo, identificados como Gerardo “N” y Diego “N”, fueron vinculados a proceso por su probable responsabilidad en el de lito de homicidio culposo.



La Fiscalía General de Justicia del Estado informó que esto derivó de omisiones en los protocolos de atención médica a un detenido de nombre Jesús Manuel, quien fue asegurado por daños, amenazas y portación de arma blanca, lo que derivó en su muerte.


Los medios de prueba integrados en la carpeta de investigación señalan que a las 09:00 am del 14 de mayo pasado los oficiales detuvieron al afectado en calle Mojave y Peña Blanca, del fraccionamiento Oasis Solana, al surponiente de Hermosillo, donde reportaban un robo de un pick up Dodge Ram, modelo 2021.


José Ángel Román Rodríguez, director de la Policía Preventiva Municipal, señaló que los agentes no han sido dados de baja, además de que se les proporcionó asistencia jurídica, la cual mantendrán.


“Precisamente el señor comisario, junto con el señor alcalde, se les proporcionó asistencia jurídica desde el primer momento que tuvimos conocimiento de que los compañeros habían sido detenidos por personal de la Fiscalía”, expuso.


Asimismo, en la propia carpeta de investigación se indica que después del arresto Jesús Manuel “N” se golpeó contra las paredes del vehículo donde fue detenido y de la camioneta en la que fue trasladado a las instalaciones de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal para ser puesto a disposición del agente del Ministerio Público, donde falleció momentos después.


“Ya estando a disposición del Ministerio Público es cuando el Ministerio Público gira los oficios de medicina legal para que esta persona sea revisada, manifiestan los compañeros que, desde el momento de la detención, el traslado a la sede ministerial, la persona detenida nunca manifestó que requería atención médica, por eso es que no se les brindó atención médica”, subrayó.


El juez de control determinó que se les vinculara a proceso a los policías, luego de constatar que habían incumplido el Protocolo Nacional de Actuación para el Primer Respondiente, donde se exige la procuración de atención médica inmediata de cualquier detenido que presente lesiones.

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