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El Congreso de Sonora ratificó las reformas constitucionales en materia de Guardia Nacional, así como de pueblos y comunidades indígenas y afromexicanas, ambas aprobadas por el Congreso de la Unión.


El primer dictamen fue aprobado por mayoría calificada con el voto de 24 diputados a favor y 5 en contra; el segundo fue aprobado por unanimidad.



La reforma sobre la Guardia Nacional, enviada por la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales, la define como una institución de seguridad pública profesional, integrada por personal militar con formación policial, dependiente de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).


Adicionalmente, le otorga la función de auxiliar del Ministerio Público en la investigación de delitos; reconoce a sus miembros derechos, prestaciones y seguridad social iguales a los de las fuerzas armadas, y los sujeta, para fines disciplinarios, al fuero militar.


Por otra parte, la reforma al artículo segundo constitucional en materia de pueblos y comunidades indígenas y afromexicanas, remitida por la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales, tiene el objetivo de saldar la deuda histórica con los pueblos originarios al ser considerados sujetos de derecho público, con personalidad jurídica y patrimonio propios.


Asimismo, garantiza a pueblos y comunidades indígenas y afromexicanas el pleno goce de sus derechos, con una perspectiva integral e intercultural, mediante el reconocimiento de sus sistemas normativos. También permite que ejerzan de forma efectiva el derecho a ser consultadas cuando alguna medida legislativa o administrativa les afecte

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